Destroyer. Una mujer herida
La detective Erin Bell, antaño infiltrada en una peligrosa banda, puede por fin ajustar las cuentas a su enemigo.
La detective Erin Bell, antaño infiltrada en una peligrosa banda, puede por fin ajustar las cuentas a su enemigo.
Los Ángeles, California, época actual. Maria Altmann (Helen Mirren), en el cementerio, despide a su hermana recientemente fallecida, el último pariente que le quedaba. Los objetos heredados de la difunta despiertan en María los recuerdos de su Viena natal, de la que huyó con su marido, hace ya más de medio siglo. Parecíale que se habían borrado de su memoria los atropellos, expolios y humillaciones sufridos por su familia durante la ocupación nazi.