Cine y Valores

Bendita calamidad

Título original: 
Bendita calamidad
Género: 
Puntuación: 
5

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Publico recomendado: 
País: 
Año: 
2015
Dirección: 
Fotografía: 
Distribuidora: 
Duración: 
108
Contenido formativo: 
Crítica: 

Los atribulados hermanos Fayos, Anselmo y Ricardo, están pasando un mal momento. Deben una gran cantidad de dinero, el bar que regentan en Zaragoza, no les produce beneficios y sus acreedores, unos estrafalarios prestamistas sin escrúpulos, les están amenazando. Para intentar encontrar una solución, van a ver a un pintoresco abogado, Antonio Orestes, quien acaba organizando con ellos el disparatado secuestro de un rico constructor con oscuros negocios inmobiliarios, durante la tumultuosa fiesta del Cipotegato en Tarazona, para cobrar por él un sustancioso rescate. Pero dada su falta total de pericia, cometen un lamentable error y a quien se llevan es al mismísimo obispo de la diócesis. Orestes, en su papel de “jefe de la banda”, les ordena continuar con el plan con la nueva víctima mientras él busca una solución en Zaragoza. En la frenética huida por el Moncayo de los dos presuntos “yihadistas” y el obispo secuestrado, los conflictos y las adversidades se suceden, creando situaciones esperpénticas e hilarantes: en medio de un rebaño de cabras pierden el teléfono móvil con el que debían comunicarse con Orestes para recibir sus instrucciones; no logran encontrar un escondite adecuado; se topan con una banda de narcotraficantes; el obispo cae a un pozo…
La película presenta algunos puntos débiles, como la periodista televisiva, que resulta un poco extemporánea junto a los personajes protagonistas, graciosos y bien trazados como estereotipos del humor aragonés en la línea de Paco Martínez Soria; o como la subtrama del tesoro de la catedral, que da la impresión de ser un recurso traído por los pelos porque no se sabía cómo terminar la historia. Los actores cumplen bien en general, pero entre ellos destaca, sin ninguna duda, un magnífico Luis Varela encarnando al obispo.
Con sus limitaciones, “Bendita calamidad” es una comedia divertida, de humor blanco carente de groserías. Aunque hay que suponer que quien más la disfrute será el público aragonés, es película que nos permite pasar un buen rato y salir del cine todavía con la sonrisa puesta.