LIBERTAD O ESCLAVITUD
Álvaro, Cristina, Paula y Alberto son cuatro empleados en crisis que trabajan para la misma empresa de cosmética. Álvaro, el director, es un ególatra, vanidoso y aprovechado a todos los niveles; Paula es una joven que sueña con triunfar y ofrecer un nuevo aire a la empresa; Alberto es un tipo apocado, que carece de atractivo físico; y Cristina vive una vida infeliz y tiene dudas de identidad sexual.
Los personajes se desdoblan con su propia imagen reflejada en el espejo, dialogan con su Yo como si fuera un Tú. En clave de comedia, con algún tinte dramático, presenta al ser humano como alguien en quien se dan dos facetas: quien aparece exteriormente, presionado por el ambiente, la sociedad, la familia, la cultura... y, por otra parte, las tendencias, los impulsos, las pulsiones... que, como un alter ego, le invitan a darles a ellos rienda suelta y a liberarse de todos los convencionalismos.
La película no se refiere a un afán de autoconocimiento para desarrollarse y perfeccionarse. Eso supondría que se tenía en cuenta la razón para analizarse y no solo los instintos y las emociones, e implicaría un cierto código ético humano. De lo que trata el film es de dar rienda suelta a los impulsos y deseos. A eso lo denomina “búsqueda de la propia identidad”. Es decir, el resultado ideal, según el planteamiento del film, sería alcanzar un constructo a partir de las emociones.
La libertad que tanto se preconiza y con la que se entusiasman los personajes supone liberarse de las presiones externas de cualquier tipo para dejarse llevar por pasiones, instintos y pulsiones. Es decir, la libertad de la que se habla es, en realidad, una sumisa esclavitud de lo más primitivo del ser humano, prescindiendo de la inteligencia y de la voluntad para trazarse un proyecto valioso de persona, para alcanzar el cual uno de be ostentar señorío sobre sí mismo. La película nos ofrece una pobrísima imagen de hombre.
El reparto es muy bueno (conmueve la presencia de Verónica Forqué), pero no consigue reflotar el planteamiento tan endeble de una comedia que apenas si provoca alguna sonrisa. El desenlace es tan abrupto que casi te hace olvidar la amargura de una idea de ser humano tan pobre.