Cine y Valores

Errementari. El herrero y el diablo

Título original: 
Errementari
Puntuación: 
6

Average: 6 (1 vote)

Publico recomendado: 
País: 
Año: 
2017
Dirección: 
Fotografía: 
Distribuidora: 
Duración: 
98
Contenido formativo: 
Crítica: 

Álava, siglo XIX, en plena guerra carlista. Un destacamento del ejército liberal intercepta a una patrulla carlista que transporta un importante alijo de oro para el general Zumalacárregui, y fusila a todos sus miembros. Pero uno de ellos aparece como indestructible, las balas rebotan contra su pecho sin herirle. Avanza como un espectro endemoniado, se revuelve contra los aterrorizados soldados del pelotón de fusilamiento y los elimina a todos. Diez años después, ese hombre, el herrero Patxi, vive en las afueras del pueblo, aislado de todo contacto humano, en su siniestra herrería protegida de intrusos y miradas por vallas infranqueables y peligrosos cepos. Nadie ha tenido ninguna relación con él, pero se cuentan oscuras historias sobre misteriosas muertes y pactos con el diablo y hasta sobre el paradero desconocido del oro de los carlistas, que desapareció ese día en que Patxi salió inexplicablemente indemne de la terrible carnicería. En el pueblo todo el mundo teme y odia a Patxi, y nadie se atreve a adentrarse en lo profundo del bosque donde está su terrorífica casa. Hasta que un día…

El relato está inspirado en un viejo cuento tradicional, que ha llegado hasta nuestros días por transmisión oral y que forma parte de la cultura ancestral de una tierra tan rica en mitos y fábulas tenebrosas como es el país vasco. Pero Paul Urkijo y Asier Guerricaechevarría logran hacer una interesante adaptación, con toques personales imaginativos muy acertados, sin perder nada del sabor a autenticidad. Para conservar ese aroma de sombras antiguas, hay que ver la película en versión original, una antigua variante lingüística del euskera ya desaparecida, propia de la región de Álava. Por supuesto, hay que verla con subtítulos, incluso los conocedores de la lengua vasca actual, que seguramente tendrían dificultad para captar todos los giros y expresiones.

Paul Urkijo consigue imprimir a la historia un ambiente de terror denso y convincente. Hay pocos sobresaltos, pero a cambio la atmósfera es tétrica y opresiva de principio a fin. Contribuye eficazmente a ello la hermosísima fotografía nublada de Gorka Gómez Andreu, que impregna las escenas de la necesaria atmósfera oscura y tenebrosa; así como también la banda sonora de Pascal Gaigne y Xabat Lertxundi va provocando una suerte de miedo sordo en el espectador. Urkijo juega bien con los personajes, no los muestra demasiado en detalle, para mantener la intriga y la tensión y no perder el halo de misterio que los envuelve. Sin embargo, la segunda parte de la película pierde un poco de esa moderación, especialmente en las escenas finales en el averno, que resultan excesivas y desmerecen un poco la contención y la mesura en lo fantasmagórico de todo el resto.

El reparto hace un trabajo adecuado, especialmente los personajes principales, entre los que cabe destacar a la niña Uma Bracaglia, fantástica como la huérfana Usúe.