Cine y Valores

Mia y el león blanco

Título original: 
Mia et le lion blanc
Puntuación: 
7

Average: 7 (1 vote)

Publico recomendado: 
País: 
Año: 
2019
Dirección: 
Fotografía: 
Música: 
Distribuidora: 
Duración: 
98
Contenido formativo: 
Crítica: 

NACIDO PARA LA LIBERTAD

La familia Owen, John, Alice y sus hijos Mick y Mia, de 13 y 11 años, regresan a Sudáfrica desde Londres con el fin de hacerse cargo de la granja en la que crían leones en perfectas condiciones, para preservar la especie y para venderlos a parques zoológicos que, a su vez, los mantendrán de forma totalmente adecuada. Mia se encariña con un cachorro de león blanco que acaba de nacer, al que deciden llamar Charlie. Ella lo cría, le da el biberón y lo cuida como si fuera un bebé. El animal adora a Mia y ambos se convierten en una pareja inseparable durante tres años. Sus padres no dejan de advertirle que van a tener que tomar distancias porque un león es un animal salvaje, no puede ser una mascota. Pero la niña lo quiere tanto que no atiende a razones.

Gilles de Maistre filmó en tiempo real, durante tres años, la relación entre la joven actriz y el león. En ese tiempo, Charlie acaba convirtiéndose en un león enorme. Los dos, niña y bestia, han ido creciendo juntos y su unión no ha hecho más que estrecharse, a pesar de algunos sustos, que es lo menos que cabía esperar.

De principio a fin del film, el animal es de verdad y las escenas de Mia con el león son reales. Ni Charlie es producto de técnicas de animación, ni Daniah De Villiers es doblada en ningún momento, lo cual le da, ciertamente, un valor añadido a la película. La grabación ha sido posible gracias al asesoramiento y colaboración de Kevin Richarson, acreditado naturalista y etólogo sudafricano, conocido como El encantador de leones, por la forma en que consigue interactuar con ellos. De hecho, solo Daniah De Villiers y, en parte, Ryan Mac Lennan (los personajes de Mia y Mick respectivamente), han sido rodados junto al león, siempre ante la mirada vigilante de Richarson, mientras que el resto del equipo -técnicos y actores- han estado siempre protegidos por rejas.      

De principio a fin, el film mantiene en tensión al espectador, por el realismo de la acción y por el interés de la trama, que implica una denuncia de ciertas prácticas deleznables respecto de la trata de animales salvajes. Es una película muy interesante para toda la familia, con una llamada de respeto por los animales, tanto para no utilizarlos de forma espuria como meros objeto de negocio o diversión, como para desnaturalizarlos intentando convertir en una suerte de peluche a quienes han nacido para ser bestias salvajes en su entorno. Pero es también una historia sobre la familia, sobre el dilema de un padre, ante una situación muy difícil, entre mantenerse fiel a su código ético u optar por utilizar medios de los que se avergonzaría delante de sus hijos si estos llegaran a conocerlos. Y enseña también que las relaciones en el seno de la familia deben estar siempre basadas en el amor, la sinceridad y la ayuda mutua, sin miedo a reconocer los propios errores.